La
zona donde nos encontramos posee una gran importancia geológica ya
que en ella predominan las calizas del Cámbrico. En esas calizas
podemos encontrar fósiles de arqueociatos
y de trilobites, seres que vivían
aquí cuando, hace unos 550 millones de años, todo lo que veíamos
a nuestro alrededor era un antiguo mar poco profundo. A través de
los fósiles se puede estudiar la evolución de los seres vivos,
cómo han ido cambiando a lo largo del tiempo adaptándose,
por selección natural, a los nuevos ambientes.
- Los arqueociatos son organismos marinos,
bentónicos, generalmente sésiles que vivieron en aguas poco
profundas (10-50 m.), formando junto con las algas conjuntos arrecifales.
Tuvieron una distribución geográfica muy amplia durante el
Cámbrico Inferior, perdurando de forma residual y muy restringida
durante el Cámbrico Medio y Superior. Su posición biológica
es algo incierta, siendo un filum independiente próximo a poríferos
(esponjas). En Europa el primer ejemplar fue encontrado en Sierra Morena
en el año 1878 por Macpherson y fue denominado Archaeocyathus marianus.
- Los trilobites fueron el grupo de artrópodos
que dominó en los mares Paleozoicos. Eran bentónicoa y su
nombre se debe a la división del cuerpo en tres lóbulos longitudinales
(uno axial o central y dos pleurales o laterales) que a su vez están
divididos transversalmente en tres regiones: cefalón, tórax
y pigidio.
La abundancia de éstos fósiles se debe a sufrían frecuentes
mudas de su caparazón a lo largo de su crecimiento. La composición
de éste, rica en carbonatos, también facilitó su fosilización.
En el Arroyo Pedroches tenemos constancia de la existencia de ejemplares
como Redlichida y Ptychopariida.
A ambos lados del arroyo, hay margas arenosas de un periodo geológico
mucho más moderno, conocido como Mioceno, donde también puedes
encontrar gran variedad de fósiles marinos y restos conchíferos.
Estas calizas, son, en la actualidad, explotadas en las canteras por la
fábrica de cementos Asland.